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JESSICA FLORES - DISEÑADORA

COCTEL – JOYERIA FRUTAL

“Delicias hechas accesorios”


“El factor que me ha impulsado a hacer más cosas es que me gusta mucho estar experimentando y si me llega una idea loca la hago a ver qué tal sale”


Y esta es la entrevista que le hice a Jessica hace algunos años, sigue vigente y es interesante, así que no pierdas detalle de la misma, puedes también ver el video que te comparto al final de la entrevista y no te olvides de seguirla en sus redes sociales.


Un producto original y hermoso, buena actitud, diseños variados, gusto por experimentar y mucha pasión... esos son los ingredientes del delicioso Coctel que la joven diseñadora y emprendedora Jessica Flores nos presenta, retomando una idea ya existente para rediseñarla de tal manera que surgiera algo que a ella le pareciera irresistible de usar, por eso hasta la fecha sigue siendo su mejor publicista debido a que nunca deja de usar una de sus creaciones surgidas de jugosas frutas, de nutritivas verduras o de divertidas golosinas, convirtiendo en duradero algo que está destinado a ser efímero al tiempo que lo hace fungir como un accesorio que nos hará lucir únicas (debido a que ningún diseño será igual a otro), elegantes, frescas, divertidas y más.


Fresas, kiwis, chiles, champiñones, charales (peces), camarones, cítricos, plátanos, pitahayas, chocolates, gomitas, croquetas, lunetas y más productos forman parte del compendio de “Coctel – Joyería Frutal”, así que te invitamos a sigue leyendo y conoce más acerca de Jessica y de sus originales creaciones.


¿Cómo surge la idea de hacer accesorios de fruta?


Pues prácticamente nacen de retomar la idea ya es existente; yo creo que desde que se caen las frutas de los árboles y se deshidratan y las personas tienen la necesidad de usar algo diferente, entonces fue como retomar algo que ya existía en el mercado artesanal pero que no era manejado de la manera más comercial o vistosa, sino que era con materiales sencillos y con diseños muy muy básicos. Así que, lo que hicimos fue tomar esa idea de manera casual, porque ni siquiera fue intencional o buscado: todo sucedió un día que andaba en un parque junto con mi hermana y vi unos aretes de manzana y dije “estarían padres si tuvieran piedras y si llevaran más colores, moñitos y más cosas”, así empecé a hacer para mi y para mi hermana y en la universidad les comenzaron a gustar a más personas, así que nos empezaron a pedir, hice más y así comencé con mi negocio. Prácticamente fue rediseñar algo y aumentar a nuevas cosas porque después no fue solo fruta deshidratada, me iba, literalmente, a la dulcería a ver de qué más iba a hacer accesorios, así que veía todos los aparadores para elegir.


El factor que me ha impulsado a hacer más cosas es que me gusta mucho estar experimentando y si me llega una idea loca la hago a ver qué tal sale, por más loca que esté. Ese estar experimentando me mantiene con novedades desde hace casi 6 años que empecé. Ya ha sido mucho tiempo y muchos productos aún no se comercializan a tal grado como para decir que son obsoletos, así que a la gente le sigue gustando y los sigue comprando.



Todo primero lo deshidratas o lo compras así o cómo es el proceso...


Prácticamente todo va desde ir al mercado (risas) con mi morral, comprar la fruta, algunas se lavan, otras no, dependiendo. Prácticamente es como cocinar, hacer los cortes con mucho amor... con mucho cariño, poner los materiales a deshidratar, ahí ya hay diferentes procesos según el grado de humedad; algunos no se deshidratan como los que son ya procesados, así que, esos solo se van a recubrimiento. Pero en general se deshidrata y después se les ponen varias capas de recubrimiento para que puedan ser utilizados como productos de joyería, decoración o cualquier otra idea que se nos llegue a ocurrir.


¿Cualquier cosa se puede utilizar o hay materiales que no?


¡Todo!... todo se puede usar, he experimentado con bastantes frutas y verduras hasta los más raros; tal vez frutas y verduras que todavía no conozca esas aún no las he usado. Los materiales con los que he experimentado y que aún no funcionan son el aguacate, el maracuyá y la granada, aún les estoy buscando la cuadratura para que en algún momento sí se puedan utilizar



Tú estudiaste en algún lado, aprendiste al menos en algún lugar a deshidratar o todo ha sido empírico...


No... todo a prueba y error


Wow... sí que te gusta experimentar...


Sí, bastante... yo empecé deshidratando en el sol y conforme fui avanzando fui probando con otras técnicas, otros materiales y todo eso, pero prácticamente ha sido por estar experimentando.


¿Cuánto te tardas mas o menos en hacer unos accesorios? Supongo que hay diferentes tiempos, pero algo promedio...


Los cítricos nos lleva un poco más de tiempo, los otros materiales son relativamente más sencillos y se logran en menor tiempo. El procedimiento completo de deshidratado, recubrimiento y ensamble más o menos está entre 5 y 7 días. Algunos productos llevan doble capa de recubrimiento, otros llevan capa sencilla, dependiendo de cuántas capas se les de es lo que va aumentando el tiempo pero en promedio son entre 5 y 7 días.




¿Qué es lo que más se te vende o lo que llama más la atención?

Lo que llama más la atención tanto para extranjeros como para locales son los chiles (risas)... lo ven y es el producto con el que abrimos contacto con el cliente, es nuestro “producto rompe hielo”, porque la gente en cuanto lo ve se acerca y desata desde comentarios cómicos hasta sarcásticos respecto al chile


Albures me imagino que también...

(risas) bastantes albures y en cuanto a extranjeros les llama muchísimo la atención, porque de por sí el chile es un producto muy representativo de México de fama internacional entonces verlo de forma natural hecho arete, collar o pulsera es bastante llamativo para ellos.



El producto tiene algún cuidado especial...

Se puede mojar con ligeras brisas o ligeras lluvias... si se te llega a mojar con una lluvia más fuerte lo puedes poner a secar cerca de una fuente de calor, pero sumergirlos en agua todavía no. Desde luego que estamos trabajando en hacerlos a prueba de agua pero todavía no lo hemos logrado e incluso queremos hacer unos de tipo “invencibles” que los puedas mojar, doblar y demás, pero aún estamos en proceso al igual que seguimos trabajando en otros que tengan aroma...que estén protegidos, que sean duraderos, pero que además tengan un cierto aroma.





Realmente eres una innovadora, se comprueba con todo eso...


Sí, parte de mi lema es: “sí, eso es lo básico pero qué más hay”, siempre estamos buscando superar nuestras espectativas porque sé lo que quiero en mi vida y quiero superar mis espectativas, si con ello agrado a alguien más será genial.


¿Qué es lo que más te gusta en tu proyecto?


De hecho lo venía pensando en el camino... es un proyecto que me ha permitido vivir de él desde hace casi 6 años; ya vivo 100% de él, con sus altibajos desde luego. Me gusta que me ha permitido viajar mucho, conocer personas nuevas porque son personas que llegan a nutrirte y a ayudarte en la vida y además... esto último a lo mejor es contradictorio pero es un proyecto que me hace vivir las cosas que más me gustan y las cosas que menos me gustan al mismo tiempo, pero estoy contenta, muy contenta con lo que hago sobre todo porque me permite conocer lugares y personas nuevas.


¿Qué es eso que más te gusta y lo que menos te gusta que haces al mismo tiempo?


Lo que más me gusta son los viajes y a mi siempre me ha gustado andar conociendo, además de que voy a lugares artesanales o donde se exponen ideas nuevas de artesanos, artistas, diseñadores, etc. Entonces me permite ver qué más se está generando y eso alimenta mi hambre de saciar mi curiosidad. Lo que menos me gusta paradojicamente son las ventas, a muchas personas no les gustan, a mi tampoco (risas) por eso te digo que me permite hacer lo que más me gusta y lo que menos me gusta porque las ventas es lo que hago constantemente, pero lo hago a mi forma y mi estilo para ir superando esa parte; de hecho mucha gente comenta que se me facilita, pero quizá es por mi caracter, porque sé escuchar a la gente así que cuando llega un cliente se detectar lo que está buscando o lo que quisiera ver en el producto. De repente me comparo con otros vendedores que jalan a la gente y la convencen, la envuelven y como que hasta la manipulan para que compren pero yo no estoy muy de acuerdo con eso, no soy así... yo no tengo esa idea de que para vender mucho hay que hablar mucho, manipular y envolver, eso no me gusta por eso no me gustan las ventas, pero al vender hay que saber escuchar.





Veo que traes tus aretes y me doy cuenta que realmente eres tu propia publicidad


Soy mi propia fan (risas)


¿Y cuáles son los que más te han gustado, que quizá dijiste estos los hice pero me los quedo yo... o cuál es la fruta que más te agrada?


Han sido diferentes, no sé si sea por el color de la fruta, el tamaño o la forma o que quedan muy bien así que han ido cambiando, pero de repente podrían ser unos de fresa y si me gustó la forma digo “ay no los quiero vender”, pero los suelto y a veces son los que se venden primero... no tengo mi propia colección, no me hato mucho a algo de forma que diga “no los quiero vender”, por lo general los suelto. Por lo general lo que me pasa es que los uso y los que me ven puestos son los que quiero, así que no puedo decir “no, es que son mios”, me los quito y los vendo, de hecho me ha tocado vender los accesorios que yo traigo puestos, sobre todo porque no puedo sacar 2 modelos exactamente iguales y no puedo decir “te voy a hacer uno igual al mio”... asi que mejor, si te gusta el mio, adelante


Literalmente es un producto único cada uno que realizas, aunque sean de la misma fruta todos serán únicos...


Sí y de verdad cambian mucho... me ha pasado con clientas que de repente tengo un tiraje de 20 piezas de fresa pero algunas de ellas quizá tengan una hojita, otras son de otro tamaño, unas tienen un color, otras tienen otro color e incluso ha pasado que llega una chica y dice “estas me gustan”, se va, da una vuelta y cuando vuelve esa pieza ya se vendió y me dicen es que tenías unos que tenían tal tamaño o color y pues lo lamento mucho, pero de verdad no se pueden hacer otros igual...esto es como atender los pedidos a distancia... cuando estoy diseñando o armando los pares de repente me llega una combinación de colores y fruta y pienso “no, no lo voy a hacer porque a mi no me gustaría” pero me animo a hacerlo y en mis proximos eventos llega el dueño y son los aretes que una persona compra, es como atender el deseo oculto de alguien.

Y yo creo que eso pasa con todos los productos, de repente vas caminando y volteas a algún lugar que te llama la atención, te acercas y dices “aquí está eso que yo buscaba y ya lo encontré”... eso pasa con todo, así sean muy industriales o artesanales.... detrás de los productos hay personas, personas que los diseñan, que trabajan, que crean una conexión y una combinación infinita, por ejemplo en lo mio si lo vemos más extenso está desde el agricultor que siembra y cocecha por ejemplo una naranja que uno encuentra en el mercado o en cierta compañía y que al final uno lo consume.





¿Cómo podrías decirle a la gente por qué comprar tus accesorios, más allá de que les guste o no? o ¿por por qué la gente debería tener un producto tuyo?


Pues yo realmente solo les diría, compra lo que te gusta; si realmente hay algo en el producto que te guste pues yo no tengo por qué insistir tanto, porque uno lo va a comprar porque te gusta, no porque yo haga que te guste, tú puedes elegir que te guste o que no te guste.


¿Qué ha sido lo más raro con lo que has hecho tus accesorios? ¿Cuál podría ser el más raro o el más extraño?


De todos los materiales que he experimentado y que más me gusta pero que no hago mucho son las aceitunas, de ahí en fuera han sido los de charales*, tenemos de camarones, de verduras hacemos con tomate verde, jitomate, betabel, zanahoria... pero los más raros que me han gustado a mi en lo personal han sido los de aceituna pero solo los hice una vez e hice poquitos, pero cuando me di cuenta que tenía más de 50 materiales con los cuales trabajar sí tuve que reducir un poco para ver cuáles llamaban más la atención y enfocarme a esos y de los demás que llaman la atención hacer menos y sacarlos por temporadas para no saturarme de todo y no tener suficiente de algo de lo más demandado.





Y por último podrías dejarnos un consejo para las mujeres, para las emprendedoras, para quien tiene una idea de hacer algo...


Creo que el consejo sería en mi experiencia creo que aprender a ahorrar, aprender a administrarse que son elementos técnicos, pero creo que lo más importante es que el miedo si lo vas a tener cuando emprendes algo, es básico, pero uno debe escuchar a su corazón para descubrir lo que en verdad quieren hacer antes y sobre todo lo que las demás personas te lleguen a decir aunque sea tu mamá o personas que quieres muchísimo que te digan “no te vayas”, “no hagas”, “no esto o lo otro”, “no te vayas porque allá roban, matan o asaltan” o que se escudan en todo ese miedo que a parte el entorno lo hace crecer más y lo hace ver peor o que incluso te dicen “eso no te va a funcionar”... yo empecé con 150 pesos mi negocio y ahora para tener un inventario más extenso si he tenido una gran transformación... es como el ejemplo del chicle: compras un chicle en un peso vas y lo vendes en dos, entonces tienes dos chicles y ya tienes 4 pesos... es ir haciendo ese movimiento ir creciendo. Esto realmente me ha tocado vivirlo, simplemente hagan caso a lo que realmente quieren hacer y adelante.


Si quieres adquirir alguno de sus productos te recuerdo que ella está en Puebla pero puede hacer envíos a toda la República Mexicana, contáctala vía Facebook dando clic AQUÍ
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